La oportunidad de educar sobre redes
Proponer a los alumnos que se graben y que arriesguen no parece una idea apropiada hoy en día, pero nos brinda una oportunidad única para afrontar un problema muy grave que estamos padeciendo.
Todo el proyecto tiene que ir acompañado de un programa educativo sobre los peligros que atañe a la difusión de imágenes sensibles, tanto para las víctimas como para los autores. El concurso nos pone sobre la mesa un asunto muy delicado que debemos afrontar pronto.
PRIVACIDAD Y DERECHOS
Todas las obras se entregan en privado en sus respectivos centros, con las autorizaciones de los padres de los menores, así como los consentimientos de todos los adultos que aparezcan en la obra.
Las obras seleccionadas por los centros serán publicadas en el portal oficial del concurso, donde se evitarán los comentarios públicos. En el portal aparecerá un contacto por si hay afectados por alguna obra, ya sea por trasgredir derechos de imagen o de propiedad intelectual.
El propio reglamento del concurso excluirá de forma inmediata a todos los que hagan un uso inapropiado de imágenes u obras de otros autores. Tendrá un claro carácter formativo para todos los alumnos que se interesen en participar. Es una oportunidad magnífica para que los alumnos aprendan los límites que se deben respetar en la creación y difusión de contenidos.

